El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, ha reclamado por carta a Cataluña que incluya en su plan de ajuste para este año 1.318 millones de euros, una petición a la que la Generalitat ha respondido diciendo que no lo ve asumible.

El diario El País avanza hoy que Beteta, en esa carta, pide al conseller en funciones de Economía, Andreu Mas-ColelL,que incluya nuevas medidas en su plan de ajuste presupuestario antes del 15 de noviembre -ya sea con recortes de gastos o subidas de impuestos- por este importe para cumplir con el objetivo de déficit, que es del 0,7 % para las comunidades.

Hacienda alegó a principios de este mes que la Generalitat ocultó gastos por valor de 1.318 millones de euros, algo que negó la administración catalana, que añadió que Hacienda conocía "como mínimo desde agosto de 2013" la existencia de una relación de obras, correspondientes a carreteras y prisiones, hechas años antes con fórmulas de asociación público-privadas, por este importe.

Fuentes del departamento de Economía de la Generalitat han confirmado a Efe la existencia de esa carta de Hacienda y han añadido que Mas-Colell ha respondido a Beteta con otra misiva en la cual alega que, a dos meses del cierre del ejercicio, no se puede pedir que se imputen estos 1.318 millones a cuenta de 2015.

Mas-Colell también argumenta que los ciudadanos no pueden ser víctimas de desacuerdos entre administraciones, en este caso la española y la europea, dado que la Generalitat sostiene que esta polémica respecto a estos 1.318 millones es fruto de "diferencias" entre dos organismos: la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) y la oficina de estadística europea, Eurostat.

Según la Generalitat, la IGAE decidió incorporar estos gastos en infraestructuras al cómputo del déficit de 2013, mientras que la oficina de estadística europea, Eurostat, en cumplimiento de la nueva normativa europea SEC2010, ha decidido incluirlas en el déficit de 2015.

En cualquier caso, si estos 1.318 millones de euros se acaban imputando finalmente a este ejercicio, ello supone que la Generalitat puede sobrepasar con creces el límite de déficit marcado, ya que ese dinero equivale ya a las siete décimas de margen que tiene este año Cataluña para cumplir con el déficit.